4 enraizadores naturales para tus suculentas

Cuántas veces no nos ha pasado que andamos por la calle o en el mercado y vemos un puesto de plantas, inevitablemente nos acercamos para “solo ver” y de pronto ya estamos preguntando el precio de una linda suculenta que aún no tenemos en nuestra colección.

Y bien compramos nuestra plantita, la llevamos a casa y cuando la revisamos o la vamos a trasplantar a su nueva maceta vemos que el esqueje que adquirimos apenas tiene dos o tres hilitos rojos, aún no ha enraizado totalmente o en el peor de los casos, el esqueje es tan reciente que aún no desarrolla ninguna raíz.

Bueno, pues no nos asustemos ya que vamos a compartirte no una, ni dos, sino cuatro recetas caseras que vas a poder usar como enraizador para todos aquellos esquejes que quieras plantar.

¿Qué es un enraizador?

Un enraizador es un suplemento u hormona de la familia de las auxinas que inducen la formación del sistema radicular de las plantas.

¿Qué beneficios proporciona un enraizador?

Los enraizadores son muy importantes porque ayudan a que nuestras suculentas tengan un óptimo desarrollo de sus raíces, además de que:

• Estimula el crecimiento radicular de nuestras plantas.
• Se fortalecen los procesos de defensa de nuestras suculentas.
• Con una raíces sanas y fortalecidas nuestras suculentas estarán en mejores condiciones de absorber los nutrientes que les proporcionemos.

Lentejas como enraizador:

Así como lo lees, una semilla que todos podemos conseguir fácilmente es la primera en la lista de los enraizadores naturales, cuando las lentejas germinan, aumenta la concentración de auxinas que poseen y eso las hace ideales para elaborar un enraizador natural.

Se puede hacer de la siguiente forma:

Ingredientes:

• 1 taza de lentejas.
• 4 tazas de agua.

Lo único que vamos a hacer es vaciar las lentejas y el agua en un recipiente limpio, tapamos con un trapo o una franela y las dejamos así por 10 horas, una vez concluido este lapso drenamos las lentejas, reservamos en un recipiente el agua que les sacamos, dejamos las lentejas húmedas en otro recipiente, tapamos y las ponemos a reposar así hasta el día siguiente.

Una vez que pasaron las 24 horas, revisamos nuestras lentejas y estas ya deben tener sus colitas, es decir, ya habrán empezado a germinar, entonces procedemos a ponerles nuevamente el agua que les habíamos quitado el día anterior, reposamos unos dos minutos y las drenamos otra vez.

Esto tiene la finalidad de mantener húmedas las lentejas, volvemos a tapar las lentejas y reservamos el agua nuevamente por separado, este proceso lo vamos a repetir por dos días más.

Al cuarto día vamos a ver que las lentejas ya habrán germinado en su totalidad y entonces procedemos a vaciarle el agua con la que las hemos trabajado nuevamente, le agregamos una taza más de agua y las licuamos.

Una vez bien licuado todo con ayuda de un colador vamos a colar la mezcla y todo el líquido que obtengamos es el enraizador.

Por último, vamos a diluir el enraizador de la siguiente manera: una parte del líquido de las lentejas con 10 partes de agua, esto para que no quede tan fuerte y concentrado. Lo envasamos y lo puedes guardar en el refrigerador, tendrá un tiempo de vida máximo de 15 días.

¿Cómo usarlo?

Lo puedes utilizar directamente en tus esquejes plantados en la maceta como si los regaras o puedes colocar los esquejes en el líquido enraizador hasta que veas que les sale la raíz, sólo procura renovar este líquido cada dos días, una vez que veas que ya tiene suficiente raíz ya puedes plantarlos.

Alpiste:

Otra semilla que podemos conseguir fácilmente y también nos dará excelentes resultados para el enraizamiento de nuestros esquejes es el alpiste.

La forma de prepararlo es la misma que te describimos para las lentejas y lo vas a usar de la misma manera.

Miel:

La miel también nos puede ayudar a que nuestros esquejes desarrollen raíces y es muy fácil de usar, solo tienes que tener listos tus esquejes, mojas la punta inferior de los mismos en la miel y puedes proceder a plantarlos.

Te recordamos que para que este método funcione la miel que vamos a emplear debe ser natural.

Ramas de sauce:

Si vives en una zona en la que haya sauces, puedes aprovechar algunas ramitas de ellos para elaborar este enraizador, te compartimos lo que necesitas y cómo hacerlo:

Ingredientes:

• 200 gramos de ramitas de sauce (deben ser ramitas tiernas o jóvenes).
• 1 litro de agua.

Tomamos las ramas del sauce y les quitamos todas las hojitas que tenga, posteriormente vamos a cortarlas en pedacitos.

Colocamos los trozos en agua y las llevamos a fuego hasta que hierva, apagamos el fuego y dejamos enfriar. Una vez que se enfrío retiramos todos los pedazos de las ramas de sauce y el agua es la que nos va a servir como enraizador.

Este enraizador lo podemos envasar y guardar en el refrigerador en donde se conservará y tendrá una vida útil de 2 meses.

Para usar este enraizador solo necesitas poner un poco en un vaso y ahí colocas tus esquejes, los dejamos reposar una noche y al siguiente día ya puedes plantarlos.

Como puedes ver elaborar tus propios enraizadores es muy sencillo, así que esperamos que muy pronto puedas probarlos, te sirven también para plantas ornamentales y las del huerto.